L'Essentiel Restaurantes en San Juan de Luz

Opiniones de viajeros Google L'Essentiel

4.9 sur 5 525 Opinión

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  4 sur 5 Opinión publicada por Nerea Pérez Odriozola el 01/04/2024

  Fuimos a cenar en pareja, la comida es increíble, estaba todo muy bueno. Es un poco caro, pero es normal teniendo en cuenta la calidad; además, te sirven un aperitivo de la casa que nos pareció un detalle y estaba muy rico. Muy recomendable el entrante de vieiras asadas y el plato de pichón. No pedimos postre y fueron casi 80€ (el aperitivo de la casa, 1 entrante, 2 platos y el agua) No le damos 5 estrellas porque, a pesar de que la comida nos encantó, hubo un detalle que nos pareció feo, y suponemos que fue porque somos turistas, y eso queda muy mal: sólo quisimos agua para beber y nos sacaron una botella (bastante cara para ser agua jaja 5€) hasta ahí todo normal, la cosa es que cuando echamos un vistazo a las demás mesas (los comensales eran franceses jaja), todas tenían agua fría en jarra (gratis). No nos importa pagar por una botella de agua obviamente, es el gesto que creemos que quedó bastante feo. También el hecho de que la carta SOLO esté en francés nos dejó mucho que desear, estuvimos traduciendo la carta con el traductor del móvil para poder pedir, ya que los camareros tampoco hablan otro idioma que no sea el francés (aunque las camareras fueron muy majas con nosotros)

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  5 sur 5 Opinión publicada por Alejandra Blanco el 28/03/2024

  Súper bien todo, la atención genial, a pesar de que no hablaban inglés y nosotros no hablamos francés, nos entendimos a la perfección y todo lo que pedimos nos encantó.Recomendadisimo!

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  4 sur 5 Opinión publicada por Aline Aka el 28/09/2023

  De paso por San Jean de Luz, probamos este retaurante mencionado en la guía Michelin. No defrauda en absoluto y supera todas las expectativas. Un servicio esmerado, con el personal siempre atento a los comensales pero de forma discreta. Recomendable para los amantes de la cocina francesa clásica revisada para el siglo XXI. Probabamos los blinis con salmón para entrante, un rodaballo exquisito y meloso, palomo al cajòn que se deshacía en la boca. El único bemol, el entrante de cangrejo y gamba nadaba en un concentrado de tomate que mató el gusto del marisco. Una deliciosa carta de vinos.